lunes, 28 de diciembre de 2015
El trombón-desastre
viernes, 25 de diciembre de 2015
Los secretos de la nada
La nada de la soledad,
o el testigo de lo mejor de nosotros...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
lunes, 21 de diciembre de 2015
Solos
Cuando un vendaval arrasa una región
y aniquila toda forma de vida,
los fuertes son los que se quedan solos...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
Jugador-juguete
Sobre lo que pone triste
martes, 15 de diciembre de 2015
Guiarte
Hay talentos para todo,
pero cada uno tiene su cómo y su cuándo;
también los hay quienes,
cuando todo está perdido,
cuando una estrella del cielo se aproxima
o va a explotar la tierra en mil volcanes,
surgen de su escondite
y con un poder ajeno a todo
nos hacen llegar,
borrachos de orgullo,
hasta la misma muerte...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
miércoles, 9 de diciembre de 2015
Burbujas de aire
No se añora al ser,
sino a la capacidad de ilusión
que perdió por el camino
-igual que él...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
lunes, 7 de diciembre de 2015
Coincidencias, cuellos y comadrejas
El lenguaje hablado es sólo una farsa. ¿Hay consenso realmente en la acotación de los conceptos sobre esa realidad que jamás veremos? El lenguaje es un pasatiempo, un ejercicio de una especie animal genuinamente esquizofrénica que sólo sirve para lo inmediato, pero desde luego es sólo un engaño comunicativo. Nadie ve nada a través de los ojos de otra persona, nadie es capaz de salir de sí mismo y resulta aburrido y desalentador comprobar cómo se discute sobre temas en los que se está de acuerdo, por una mera confusión terminológica o distribuciones conceptuales de la misma cosa que resultan incompatibles. Y nadie es capaz de entender eso: viven en sus películas de minidramas intrascendentes como si fueran un universo del que por supuesto te mantienes fuera porque no cabes en él. Una mera cuestión de claustrofobia. Nada tiene el más mínimo interés y la vida es sólo una droga, la mayor de todas, una realidad virtual que sólo se la puede creer un auténtico majadero. Un simple juego de mesa para chistes y chascarrillos chabacanos con café, mucha vanidad y muchas ganas de morir que la falta de conciencia y lucidez de los jugadores ignora, por no caberles en la memoria RAM de sus apps cotidianas ideas tan complejas.
(...)
Raquel fue durante un tiempo un giro enérgico y vital de cuello: en varias ocasiones en que coincidimos en algún bar, la caracterizaba eso. Podía notar con el rabillo del ojo cómo al pasar junto a mí y percatarse de mi presencia giraba la cabeza, toda entera, de un sólo gesto lleno de decisión, haciendo voltearse su largo pelo negro con ella, para analizarme de arriba a abajo mientras yo me hacía el despistado y asentía a lo que mi interlocutora decía, y luego seguir su camino a pasos largos y rápidos hacia su grupo de gente. Así la reconocía: al girarse. Me gustaba esa manera de mirar y moverse, denotaba personalidad. Fueron varias veces, la encontraba muy atractiva y tras la última decidí hacer algo por conocerla- no en el bar, donde los roqueros te saludan todos efusivamente para despellejarte luego. Es fácil localizar a los miembros de la secta de grupies y rockeros de barra locales porque se entremezclan, aparean y arrojan cosas como animales histéricos de manera endogámica, en grupos pequeños. Por ello, con sólo mirar los contactos de mi amiga fue fácil localizarla.
Resulta curioso cómo la lujuria es capaz de ensordecer las advertencias de la conciencia, tan vapuleada por la insensatez del corazón: esta clase de tías responden a un esquema animal de reacciones químicas aleatorias y tremendamente histéricas; más o menos como ellos. Que no noten tu inteligencia, sobre todo, porque eso les altera especialmente. A pesar de sus aspiraciones a la sensibilidad, la distinción y la elegancia, a la mínima les sale la comadreja de dentro y gritan, insultan, pierden los papeles, rompen cosas, amenazan y chapotean sin pudor en el barrizal de la indignidad. Viven una vida que aspira a una novela mala y tienen sueños de películas absurdas, pero al final sólo llegan a la altura de cualquier programa basura donde los participantes compiten por ver quién alcanza mayores grados de sordidez; follarse a los novios de sus amigas mientras el suyo hace también lo propio y recrearse en la tensión y el dolor de las situaciones las hace perfectas para eso, y además todo en casa, entre los mismos de siempre, como una gran familia, mientras se ponen a parir unos a otros para expiar sus conciencias vacías. En cierto modo es natural que acaben siendo grupies, es necesaria una mentalidad infantil y muchas faltas de miras para serlo y de eso andaban sobrados todos. Sin talento alguno excepto para beber, drogarse y follar (algo de lo que es capaz mi perro si se lo sirvo), creen que la creatividad, para cuya visión son miopes, les entrará por el puerto USB del coño, como por arte de magia, y que los méritos de sus concubinos se absorberán en un proceso osmótico a través de los tejidos de su aparato reproductor. ¿Cómo puede fascinar a nadie un músico sólo por serlo? La música está tirada (lo realmente difícil es la vida) y alguien que queda hechizado no por ella, la música, como un estadio superior de armonía matemática, sino por el músico, como si lo que hiciera fuera un acto de magia, demuestra ser lo suficientemente ignorante como los nativos de cualquier tribu cuando ven lo divino en un avión. No se puede traspasar la barrera de lo superficial con estas personas-comadreja. Lo importante es posar sin faltar al puesto ningún día, como si la saciedad de su vanidad dependiera de dejarse ver y opinar al gusto de una galería bizca.
Sin embargo, decidí no ser tan estricto; tal vez hubiera alguien detrás de todo eso. Tal vez Raquel tuviera algo dentro después de todo. Supongo que por fijarnos el uno en el otro simultáneamente decidí inventarme toda una historia que seguramente era mejor que ella.
(...)
Los conflictos personales suelen suceder por cómo se acotan los conceptos. Para algunos, el compañerismo contiene la permisividad ante pequeños abusos del otro; para otros, no. Y la guerra de recriminaciones da comienzo. Y para algunos la agresividad es aceptable hasta un límite concreto, que otros ubican más lejos o más cerca de sí mismos. En general, todos matan ante el miedo de no ser respetados, sea lo que sea lo que ellos entiendan por eso, y es innata la terquedad del simio por considerarse en estado de gracia sólo por ser él, sin ser suspicaz ante semejante coincidencia. Eso puede producir un ataque de ansiedad en un niño de cuatro años con un mínimo de lucidez en medio de crías de chimpancé que sólo piensan en plátanos. No es lo que sucede, sino no poder explicarlo.
(...)
Raquel tenía pareja, como comprobé al establecer contacto con ella vía facebook; sin embargo, la conexión entre nosotros crecía de manera exponencial a través de la red. Era brillante escribiendo, original y creativa, con mucho sentido del humor. Pero tenia pareja y era mi norma mantenerme al margen de ese mundo de engaños entre desesperados. Mala suerte. Parecía sensible, inteligente, le gustaba la poesía, la literatura, el arte, la música y el cine, y manejaba muy bien ese humor negro y sarcástico que tanto me gusta, con un talento especial para sorprenderme, lo que siempre ha resultado muy difícil, pero lo dejé todo aparcado. Si alguien te gusta realmente, no es buena idea empezar mostrando lo hipócritas, falsos, mentirosos y crueles que se puede llegar a ser, y el veneno de un mal comienzo condena a toda relación, porque los humanos estamos completamente locos y somos incapaces de perdonar o comprender absolutamente nada.
Sin embargo, semanas más tarde me escribió por privado para contarme que había soñado conmigo y que ese sueño acabó en la cama. Decía sentirse fascinada por mi mente y su contenido, debido a mi profusa y compulsiva actividad paranoide en facebook, y afirmaba que lo quería absorber todo. Siempre dejando esa estela de barco de bucanero, la sentías siempre al asalto de cualquier tesoro. También le fascinaba la cabeza de su novio; y la de su penúltimo novio, y el antepenúltimo. Jamás la oí admirar la cabeza de ninguna mujer ni de ninguna de sus amigas en esos términos apasionados con que otra hablaría de las respectivas pollas de sus amantes. Y ante sus afirmaciones empoderadas de no necesitar sexo, uno se preguntaba por qué no era capaz de admirar una mente sin un rabo adjunto, lo que evidenciaba carencias en su forma de "venderse" y un sentido competitivo chungo con respecto a otras mujeres. En fin, adorar a hombres y ansiar conseguir su superioridad mental no dejaba de ser un rol muy tradicional, aunque fuera vestido con tachuelas y chupas de cuero suficientes para otros. Pero yo seguía sin querer verlo: estaba empeñado en creer en la conexión extraña que manteníamos, en algunos momentos llenos de magia, en un extraño determinismo del destino.
Meses más tarde, tras una quedada de amigos en la que coincidimos todos, su pareja incluida, volvió a escribirme para contarme otro sueño. De pronto, estábamos hasta el amanecer escribiéndonos por el móvil. Sin darnos cuenta, se nos estaba saliendo el corazón del pecho ante nuestras palabras, y acabamos hablando de ello, y un mes más tarde quedamos y nos acostamos en lo que pareció ser un sueño que no estaba anclado a ningún sitio. Y a pesar de que adivinaba que ella sólo quería usarme para salir de una relación en la que se sentía encarcelada, seguí empeñado en que la gente no podía ser tan horrible como yo la veía. Que el problema era yo.
- Lo dejaré- me dijo.
Y la creí.
(...)
Otro de los problemas de comunicación humana es la confusión del sujeto con el objeto; así, se es capaz de atacar al otro por un espejismo de sí mismo, para expiar las propias culpas. Todo esto, unido a la confusión conceptual, explica perfectamente el por qué de una humanidad centrada básicamente en matarse los unos a los otros.
(...)
No lo dejó, en cada ocasión con una excusa distinta. Con el sentimiento de culpa fueron aflorando cada uno de los rasgos que ya había adivinado en ella tempranamente, aunque sin querer creerlo: crueldad, falta de sensibilidad, carencia de escrúpulos a la hora de hacer daño, frialdad a la hora de mentir de la manera más vil, carácter de comadreja salvaje que sólo reacciona a instintos e impulsos para hacer sangrar por hacer sangrar y sentirse viva.
Yo intentaba salir de aquello, porque veía que me había conseguido meter en esa historia que yo, por principios, rechazaba. Había un pulso sordo por derrotarse entre los dos. Raquel era una sombra que me había salido y que competía conmigo. "Odio que seas más inteligente que yo", "de mayor quiero ser como tú", "quiero robarte tu cabeza", "nunca te librarás de mí".
Las semanas transcurrían, nos empezamos a engañar mutuamente, poco a poco el veneno de lo que mal empieza iba contaminándolo todo. Haciendo balance, había sobre todo malos momentos, noches sin dormir, ansiedad y agresiones verbales. Sólo al follar se estaba bien porque apenas hablábamos, sólo para hacernos confesiones que luego negaríamos.
La dejaba, ella volvía. Me dejaba, al cabo de unos días regresaba, se me colaba sin avisar en mi casa o en mi estudio. No respetaba nada, ni acuerdos ni pactos ni decisiones. Y siempre entre insultos y afirmaciones crueles sobre lo poco o nada que me necesitaba, o lo poco que yo valía, lo patético que era ante sus ojos, la terrible nada que me contenía o la mierda que era yo, comparado con su pareja, por ser un parado de mierda y un cero a la izquierda. Y luego regresaba siempre. No podía tolerar que yo no quisiera verla, era un traición a su concepto de amistad. Ella acotaba ese concepto de una manera amplísima, incluyendo dentro de él aspectos tan dispares como el odio, el desprecio, la crueldad, la insensibilidad, la desconsideración, el egoismo y la total arbitrariedad en un comportamiento que no acepta ningún tipo de compromiso ni de coherencia, por su parte, frente a una simple aceptación de los hechos sin rechistar ante nada, por la mía. Es decir, la amistad incondicional de un padre. Esa coincidencia que apuntaba arriba, donde lo más excelso coincide con uno mismo y lo hace merecedor de todo sin deber jamás nada ni tener que demostrar nada a nadie.
Si le decía que fueramos sólo amigos, se me tiraba al cuello y no paraba hasta acabar de follar; luego, días más tarde, me proponía lo mismo como si lo hubiera descubierto ella, y volvía a pasar, acto seguido. A la décima pelea, que quedó en la fase del ya monótono ciclo titulada "seremos sólo amigos", simplemente me harté y lo mandé todo al carajo. "Tú y yo no hemos sido amigos nunca" le dije. Semanas más tarde volvió a reaparecer para decirme que había dejado a su novio y, llena de remordimientos, soltó todo su rencor hacia sí misma sobre mi persona. Más tarde empezó a follarse a mis amigos y a contármelo. Efectivamente, yo sólo fui la llave para abrirle la puerta a la libertad, y ni siquiera se mostró agradecida por los servicios prestados, sirviéndole en bandeja lo que su cobardía no era capaz de darse a sí misma...
(...)
Cuando se acotan los conceptos tan mal, cuando la amistad, el amor paterno y el romance se mezclan y confunden, y los sujetos y objetos bailan y se intercambian los papeles, y se confunde el interior con el exterior, y se está tan brutalmente desorientado, está todo perdido. Es un ejercicio penoso intentar racionalizar el capricho infantil de una mente enferma para convertirlo en un esquema de valores coherente. La veía intentarlo y me sentía cansado. Y regresaba, una y otra vez, como si mi "amistad", que ella confundía con amor paterno, fuera imprescindible para ella, y por mi parte, fuera moralmente imperativo mantener el contacto con semejante mustélido y quedar a merced de una cabeza-veleta que no tiene miramientos con nadie. ¿Qué era eso que Raquel buscaba y tanto necesitaba?
Los conceptos parecen acotarse solos cuando no se les mira, y no mirar es abrir la puerta a la nada...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
Retrato al fuego
Cuando quemas un retrato,
quemas el momento
y el sentimiento que lo originó:
esa imagen
no volverá jamás...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
Reclamación a la Nada
Nada,
¿qué me escondes?
Mis primeros recuerdos aún sentían
la oscuridad del sueño de no existir:
mi vida era tan larga
en mi memoria como ahora,
y toda la inmensidad del resto
era un límite difuso,
como un cielo sin estrellas y aún más grande:
Nada, estabas tan cerca
que sentía tu aliento de sima
pegado al mío.
Y bien temprano
me hizo una visita la muerte
para mostrarse y saber qué es
- me llevó por los aires de la mano
al extrarradio de mi propia respiración...
¿Recuerdas, Nada,
volar a voluntad en sueños?
Eso es morir.
Nada,
me has podido llevar tantas y tantas veces
que creía que me guardabas algo;
sin embargo,
me escondes un pacto para jugar a un juego,
que yo olvidé al nacer,
y que tú, fraudulento vacío,
incumpliste luego...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
domingo, 6 de diciembre de 2015
Tren fatal
Una bolita de instintos,
como espoletas de estímulos,
con la imprevisibilidad sangrienta de los gatos;
que está a punto de estallar desde hace años,
que le hierven los ojos en la rabia de mil luciérnagas,
que escupe lava de sangre en el verbo envenenado
que dispara a sus propios desaires.
¿Cómo darle algo trascendente
si no lo puede asir y blandir contra todos,
indiscriminado como el garrote que le empala el alma?
... grita y patalea,
despeinada y para todo el mundo,
la misma vieja canción:
... "porque perdí en algún
vodevil barato de barra
mi propio sujeto"...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
El avestruz y el cóndor
Como un naufrago busco a mis compañeros perdidos:
¿Por qué veo alas
donde sólo hay peso?
No busques pájaros terrestres
aunque te aburra y deprima
la insensatez de la estepa:
olvidaron volar,
y hoy sólo rompen cráneos
con sus picos resentidos
- si alcanzan a engañar a un cóndor,
que vuela alto,
sólo pendiente de la vida
y de la muerte,
le intentarán arrebatar las plumas
por un placer lacónico
de humillación amarga...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
Antídoto
Cuando miro a lo errático,
que baila inconsciente su danza de peonza,
como si todo lo que aparenta,
fuera,
éste se detiene,
grita que no me necesita
y continúa hasta que vuelvo a mirar.
Y así todos los días durante miles de años:
sólo porque veo en su inocencia
el triunfo del engaño
cree que voy a tirar de su cuerda
- comprendo lo que no sabe comprender,
y así se rompe el hechizo...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
La falta en la mentira
Jactarte de tus propias mentiras
es publicitar tu falta de escrúpulos,
y no hay mejor vestido para la nada
que la falta de todo...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
sábado, 5 de diciembre de 2015
Discriminando rasgos
Buscas algo,
y lo que buscas no se encuentra:
estas cosas ni se ven ni se palpan
ni están en ningún sitio,
no se compran
-ni menos se pactan.
Pero incluso en el imposible caso
de que vieras un brote de eso que quieres robar,
y tiraras de él,
sólo arrancarías la última raíz
cuando todo mi ser estuviera fuera de la tierra
-que no lo sepas
es lo que lo explica todo...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
A solas
El silencio y oscuridad vuelven locos a los hombres:
nada es peor que sentir cómo se expanden,
a solas con el tiempo...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
Receta para muertos vivientes
Al amor se le mata como se matan
todas las cosas vivas:
hiriéndolo sin pausa...
... muerto.
...
...
...
..
..
..
.
.
.
Los dos
Hay siempre dos tipos de personas,
las que ven en la nobleza un saqueo
y desean el talento por poder,
y las que en la nobleza está su hogar,
porque ya lo tienen...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
Usar antes de huir
Todo fue mentira:
era sólo una llave
que encajaba en la cerradura
de una puerta...
... sin embargo,
al mirar atrás,
cubren las huellas
las brumas de los sueños,
o lo que es nada...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
viernes, 4 de diciembre de 2015
Espejismo
El precio de pensar en grande es ver
la nobleza del búfalo en minúsculos ratones:
el poder de darles grandeza
lo visten como una capa,
se creen gigantes,
y por eso nunca crecen...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
jueves, 3 de diciembre de 2015
¿Por qué?
Repito:
Hace girar la moneda sobre el canto como un trompo,
pero las de ella nunca se paran,
nunca son cruz,
nunca son cara:
siempre son giro,
redondo y rotundo
con destellos de metal...
Por eso no entiendo tu pregunta,
ni tú entiendes mi respuesta...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
Conocerse en sueños
... será otra noche en vela.
Nadie avisó del beso que hace nocturna
la vigilia, y somnolientos los días...
La vida se llena de criaturas que reflejan el sol y proyectan sombras,
- a veces surgen luces cegadoras con oscuridades totales...
Ninguna duerme.
Todo está de más contigo
y todo está de menos sin ti,
en cualquier noche
- qué extraño hermanamiento de monstruos
sedientos por romperse en una misma madrugada,
sonriendo...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
lunes, 30 de noviembre de 2015
Desde cerca
Nada suena tan cerca como lo que está cerca
si también se oye al mar,
por eso un susurro al oído es infinito en la playa...
Podrás lamentar cada naufragio
y cada tormenta como lo haces siempre:
atento al murmullo profundo del cielo,
con la nostalgia huérfana de lo imposible,
con dolor y lágrimas, sí,
pero de las que caen y resbalan entre los dedos,
y traen el centelleo del sol que surge
por un claro a tus espaldas;
y dedos, esos dedos, sí,
que ya cosen las velas rotas,
entre viento y sollozos,
sentado en esta misma playa aún mojada
de todos los siempres...
te secas la nariz con la muñeca
con ese sonido que, frente al mar,
está siempre más cerca que frente a ningún otro sitio...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
Una capa imposible
viernes, 6 de noviembre de 2015
El gris de diez minutos
domingo, 1 de noviembre de 2015
Todo menos mi frío
El frío se instala entre la lluvia,
pero tiene color:
es del oscuro de esta habitación
en esta noche de aire helado,
y me espía desde las sombras
como un frío nuevo.
Lo sé porque se hace dueño de todo.
Este frío de color negro no sale de ningún sitio:
llena de densidad la atmósfera del cuarto
porque me sale oscuro y denso
de entre mis entrañas...
¿Qué extraña muerte me invade
que puedo contener todo este hielo
que me asusta y me congela?
Este frío es mío,
es mi recuerdo, mi creación, mi recompensa...
... llévate todo lo demás...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
Cartas que dicen lo mismo
Cuando la mentira especula, sólo se ve a sí misma
¿Cuál es la forma correcta a adoptar,
una silueta para estar en este espacio,
un volumen, una superficie hinchada?
¿De dónde emana la fuerte presunción de realidad
de las mentiras, que anula la verdad
a ojos de miras atrofiadas?
La mentira consigue el prestigio,
la verdad difamada el ostracismo,
porque la mentira es seducción
que sólo se ve a sí misma,
y la verdad no necesita de artificios...
Esa es la otra soledad:
invisible para esos ojos
que sólo pueden verse y reverse
el uno en el otro, bizcos,
... tu presencia se va haciendo un cero
en este mundo que es verdad,
frente a un equívoco
que viste de infinito la mentira
apetecible de los soberbios...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
domingo, 18 de octubre de 2015
El cómo de lo que es
jueves, 15 de octubre de 2015
lunes, 13 de julio de 2015
Conjuro de madrugada
Ahora debería haber alaridos
de madrugada,
desde los aires...
¿No oís a los gatos?
Todos arriba a los tejados,
todos a gritar desde los puentes
que el aire de la noche
lo es de una garra de invierno
que se contiene el frío,
sólo para entregarse
- o jamás habrá un verano
fuera de un rayo de sol...
...
...
..
..
.
.
.
martes, 28 de abril de 2015
La nada en un tablero de madera
Si retrocedes, gano,
si avanzas, pierdes.
Pero si avanzo yo,
tu horizonte de tablero
se diluirá en ese otro,
el que me llama de frente,
y ese, el que desde atrás
insufla viento a las velas
de mi espalda
- un mismo horizonte redondo son,
y mientras juegas a las derrotas,
me dice "vete, márchate
como los seres libres:
con la línea del cielo y de la tierra
siempre bajo los pies"...
Pero tú seguirás jugando
en los recuadros finitos de madera;
porque si retrocedes, gano,
y si avanzas, pierdes...
... y si retrocedes, gano,
y si avanzas, pierdes...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
miércoles, 25 de marzo de 2015
Ecos en la vigilia
¿Dónde has estado, viajero de ojos cerrados?
El reflejo de un roble que no existe se ha hecho perenne en la retina,
el eco de un paisaje ha cambiado el
timbre de la voz despierta,
y el olor a romero, pino y espliego
testimonian la geografía de esos pasos
cuyo entorno no quiere tener nombre...
...
...
...
..
..
..
.
.
.
lunes, 2 de febrero de 2015
La longitud del verbo
Como una cometa,
mi vuelo queda atado por las palabras...
...
...
...
..
..
..
.
.
.