Mi vacío traspasa lo que me rodea.
De otro modo,
mis órganos no podrían
seguir cayendo hacia ningún sitio.
Y vives en la misma
hondonada donde antes me perdía
en mi propio eco.
Ahora toda la sima está llena,
y el exterior,
hueco.
Por eso lo que tocas suena a recuerdo compartido.
La vida-tam-tam,
exprimida en la unión,
sirve para hacer ruido...
...
...
...
..
..
..
.
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jueves, 26 de febrero de 2009
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